Como para toda capital que aspira a incorporarse al mapa de las ciudades olímpicas, la presentación de esta candidatura comporta llevar a cabo una severa intervención sobre su tejido urbano y la creación o renovación de diferentes infraestructuras deportivas. No sólo para asegurar y demostrar eficiencia organizativa y proyectar al mundo una imagen atractiva e impecable sino también para reequilibrar y revitalizar las condiciones presentes de la ciudad para sus propios ciudadanos.

El proyecto Madrid 2012 se caracteriza fundamentalmente, por la intervención en estructuras ya existentes y por la construcción de nuevas instalaciones para competiciones de alto nivel. Se ha optado por riesgos mesurados, traducidos en resultados arquitectónicos correctos.

Esta intervención plantea un concepto para orientar el futuro inmediato de la vida urbana de Madrid, más allá de la candidatura a los Juegos Olímpicos y su posible celebración en la ciudad dentro de ocho años.

El estudio Cruz y Ortiz acomete dos proyectos relevantes: la planificación del Anillo Olímpico y la ampliación de la capacidad de aforo del Estadio de Madrid. El Anillo Olímpico se sitúa a pocos minutos de distancia del aeropuerto y del centro de la capital, conectado también con otros puntos donde se ubicarían los espacios destinados al uso de los medios de comunicación y otros en los que también tendrían lugar competiciones. La planificación de la Villa Olímpica se define como una operación de regeneración medioambiental y centralidad. Se pretende, que con posterioridad a los Juegos, los edificios residenciales que se construirán para la concentración de los deportistas, se reconviertan en campus universitario.

Las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos se realizarían en el remodelado Estadio de Madrid, en el núcleo del Anillo Olímpico, cuyo graderío – popularmente llamado ‘La Peineta’ - se extenderá para dar asiento a cincuenta y cinco mil espectadores. Para los eventos olímpicos otro anillo de gradas cubierto ampliará la capacidad en veinte mil asientos más.

Otra estructura sujeta a una intervención notable para su ampliación y mejora estructural es el Palacio de Deportes Felipe II, reconstruido por Paloma Huidobro y Enrique Hermoso, que se amplía para dar cabida hasta casi diecisiete mil espectadores. Recinto polivalente capaz de albergar ceremonias deportivas y espectáculos, se encuentra en las inmediaciones del Parque del Retiro por lo que se trata de la instalación olímpica más céntrica.

El Rockódromo Arena Casa de Campo, a cargo del Estudio Cano Lasso, surge con el reto de convertirse en un pabellón soporte de actividades deportivas, artísticas, musicales dinamizador de su entorno. Su localización ha obligado a los arquitectos a realizar una intervención respetuosa con la memoria histórica, de manera que el edificio se define como un elemento de silencioso impacto.

Juan José Medina es el responsable del Centro Acuático Olímpico, que acogerá las competiciones de deportes acuáticos. El proyecto está definido por la transparencia de la envoltura de sus tres bloques, en alusión a la imagen y sensación del agua.

El Centro de Tenis Parque Manzanares, concebido por Dominique Perrault, se ha bautizado como ‘La Caja Mágica’. Debe ese nombre al hecho de que su silueta podrá variar en función del tipo de evento que aloje mediante cubiertas y fachadas móviles, creando un espacio donde se podrán realizar eventos al aire libre y a cubierto, entrenamientos y compras.

Los Juegos Olímpicos, como gran evento mediático deportivo y cultural, han derivado en un perfecto argumento para generar una forma específica de estrategia de intervención sobre las grandes ciudades contemporáneas, redibujándolas y reciclándolas, planteando así un idéntico modelo de acción urbanística teóricamente capaz de operar a nivel global.

El pretexto de un gran evento debe servir para resolver los específicos problemas de una urbe, y no enmascararlos suntuosamente. En no pocas ocasiones, espléndidos equipamientos no han sido capaces de integrarse a una dinámica urbana real y han quedado abandonados al cabo de poco tiempo. Aunque se pueda extrañar en el conjunto de la candidatura arquitectónica de Madrid algo más de expresividad y riesgo, si esta intervención se fusiona eficazmente con otras de las interesantes acciones arquitectónicas teniendo lugar en ella ahora mismo, la ciudad se abre hacia una renovada presencia en el mundo.

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Ver www.madrid2012.es

[articulo publicado en lo suplemento Cultura/s del periódico La Vanguardia, Barcelona, 07 jul. 2004]

sobre el autor

Fredy Massad y Alicia Guerrero Yeste son autores del libro "Enric Miralles: Metamorfosi del paesaggio", que se publicará en breve en la editorial Testo & Immagine.