La Biblioteca Pompeu Fabra de Mataró desarrolla un programa funcional habitual en las bibliotecas públicas. El elemento que la caracteriza y la diferencia es la utilización de paneles fotovoltaicos integrados a la fachada (300m2) y a la cubierta(300m2). Así, pues su particularidad reside en la instalación de dicho panel fotovoltaico como elemento constructivo integrado y no como mero añadido.
De tal forma, se ha realizado una fachada constituida por un muro cortina de cámara ventilada con células fotovoltaicas en su interior. A su vez, en la cubierta, los módulos fotovoltaicos revisten el faldón de los lucernarios abiertos al norte. Todo ello se integra a un volumen unitario de 31m x 37 m en planta, con tres alturas y comunicado internamente por una rampa central.
En su conjunto la iniciativa permite el abastecimiento de parte de la demanda de calor y energía eléctrica de la biblioteca.
En la cubierta, las bandas de lucernarios se separan a la distancia necesaria para evitar sombras. En la fachada, las células fotovoltaicas incorporadas al muro cortina, no permitían ningún voladizo que hiciera sombra y tuvieron que levantarse 3 metros de tierra para garantizar su seguridad.
La propia piel de la fachada actúa como amortiguador térmico, resguardando el interior del edificio. En ella se crea una cavidad en la cual el aire se calienta por insolación. En verano, el aire que afluye desde la base ventila los módulos solares y evita que lleguen a un tope de calentamiento. En invierno, el aire caliente se conduce a una planta convencional de calefacción a través de ventiladores o por corrientes libres de convección.
El módulo fotovoltaico-térmico multifuncional está formado por células fotovoltaicas con las conexiones eléctricas dispuestas entre dos láminas de vidrio. Ello permite realizar revestimientos opacos o semitransparentes que producen electricidad y aire caliente utilizando la tecnología del muro cortina.
El carácter del espacio interior de la biblioteca queda determinado por la superficie de los módulos fotovoltaicos de la fachada y de la cubierta. Las distintas plantas reciben luz natural a través de las ventanas, los lucernarios y su diseño también permite regular la luz incidente en el interior del edificio por medio de los paneles fotovoltaicos de la cubierta y de la fachada.
El uso de distintos módulos fotovoltaicos se define en función de la necesidad de aportar transparencia, opacidad o carácter a la fachada. A su vez, el edificio se modula en función de la medida de los paneles fotovoltaicos. Pero el determinismo técnico es relativo. Y esta es una de las distinciones más llamativas de esta obra. O sea, no se trata de un edificio “re-vestido” de células fotovoltaicas, sino que su particularidad radica en la utilización de los paneles fotovoltaicos como elemento constructivo integrado. Así, la tecnología y la arquitectura se pueden ver como conceptos convergentes. Esto es posible porque el edificio no hace de mediador de la tecnología, sino que se convierte en su propio signo.
notas
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Articulo publicado originalmente en Ecological Architecture. Tendencias bioclimáticas y arquitectura del paisaje en el año 2000. LOFT Publications, Barcelona, España. Agradecimiento a Oscar Aceves.
ficha
Obra
Biblioteca Pompeu Fabra de Mataró
Arquitecto
Miquel Brullet
Colaboradores
Xavier Brullet, enginyer (instalaciones)
TFM, Oscar Aceves, Lluís Sabata, enginyers (módulos fotovoltaicos)
Aparelladores
Manuel Salicrú, Vicenç Ciscar
Proyecto
1994
Realización
1995-98
Fotografías
Oscar Aceves / TFM
sobre el autor
Ana Rosa de Oliveira é professora e pesquisadora do PROPAR-UFRGS e bolsista recém-dr CNPq