Para quienes nos hemos embanderado en la defensa de la ciudad y la preservación del patrimonio arquitectónico, paisajístico y poblacional, nos resulta imprescindible explicar lo obvio:

No todo lo viejo es adecuado ni, mucho menos, todo lo nuevo desechable. La preservación misma, para ser plenamente validable, debiera ser, antes que mantenimiento o reconstrucción, propuesta dinámica y potenciadora.

Mas que regresión nostálgica o reconstrución, la preservación debiera entenderse, esencialmente, como un acto de afirmación creadora. De descubrimiento, puesta en valor y rehabilitación vital.

Ni física ni socialmente, la ciudad es un hecho compacto y homogéneo. La ciudad, escenario de contradicción y de encuentro de unidad y fragmentación, de postergación y de estímulo, es terreno fértil para la degradación y el lucro, pero también, para la experimentación y el salto cualitativo.

La coexistencia de multiplicidad de pasado, posibilita el redescubrir, el re-ordenar, el re-crear porciones soslayadas de la ciudad, presentizóndolas, redimensionando su sentido y vigencia dentro de la estructura global de la misma.

La propuesta efectuada por el equipo proyectista del "Complejo Cuareim" apuesta, precisamente, a recuperar para la ciudad toda – para Montevideo todo – una de sus áreas más deterioradas y olvidadas: la antigua zona de "La Aguada". Próxima a la Bahía y cerca al enclave portuario, fue ámbito propicio para la edificación de depósitos y locales industriales.

El acierto de la propuesta reside, a nuestro juicio, en el sensible y equilibrado aprovechamiento de algunas instalaciones fabriles en desuso poniendo de manifiesto su soterrada plasticidad, en conjunción com nuevas inserciones que no buscan la sumisión expresiva sino más bien, los diálogos compatibles com el tejido y la trama pre-existente. Y ello sin mengua de la viabilidad económica y de la ajustada respuesta a los estrictos requerimientos utilitarios. La acertada resolución tipológica de sus unidades habitacionales (nuevas o recicladas), así lo prueba. Como lo prueba también la moderación de las plazas-patio que, adaptándose a la atípica conformación de la manzana, permite una convincente gradación de usos, y un inequívoco enriquecimiento del entorno urbano inmediato.

La propuesta afirma lo que la ciudad há sido siempre: continuidad y testimonio. Memoria y cambio.

Por eso apunta a transformar lo soslayado en jalón. Y a transformar en presencia el olvido.

nota

1
Articulo escrito en ocasión de la Bienal de Arquitectura de Quito, Ecuador, 1990, y posteriormente publicado en varias revistas de arquitectura nacionales y extranjeras.

ficha técnica

Denominación de la obra
Conjunto habitacional CUAREIM

Descrición
Conjunto de 131 viviendas de categoria media (Tipo II BHU) em una zona de promoción, ocupada antiguamente por barracas y depósitos por su proximidad con el puerto de Montevideo. Reciclaje de edificios y locales de la antigua fábrica de cervezas que ocupaban la Manzana en forma casi total, siendo la sumatoria edificada de intervenciones a lo largo de 90 años de actividad fabril

Datos de situación
Calles Cuareim, Lima, Asunción y Acuña de Figueroa. Barrio La Aguada, Montevideo, Uruguay

Fecha de proyecto
Concurso Nacional de Proyectos + Precio, 1998. Primer premio

Fecha de fin de obra
1997. Inauguración y entrega a nuevos propietarios 1998

Autores del proyecto
Arquitectos Asociados Juan Carlos Apolo, Martín Boga, Alvaro Cayón e Gustavo Vera Ocampo, e Arquitectos Nelson Inda e Horacio Rodriguez

Asesores
Ings. Del Castillo e Magnone (estructura), H. Brenes (sanitario) y J. Chiaramello (eléctrico)

Promotor / proprietario
Banco hipotecario del Uruguay – BHU. Llamado CH 141 – Concurso licitación tipo Proyecto+Precio sobre predio propiedad del BHU (ex Fabricas Nacionales de Cervezas desde 1890)

Empresa constructora
Ing. Canabal S.A.

Custo total
U$S 6.000.000 (aproximadamente U$S 400,00 X m2) a la fecha de propuesta

Superficie construída
15.000 m2

Otros
Servicios anexos: Locales comunales, 5 locales comerciales, guardería, biblioteca, bar, garages 90 plazas

sobre el autor

Mariano Arana, arquitecto, es actualmente Intendente Municipal de Montevideo. Fuéi catedrático de Historia de la Arquitetura Nacional e director del Instituto de Historia de la Facultad de Arquitectura de Montevidéu, Uruguay